Grados 31 y 32.
El Subl.·. Princ.·. del R.·. Sec.·. , tiene fortaleza, templanza y justicia y le ayudan a conservar la calma, jovialidad, elocuencia y lógica de sus decisiones. En el grado 32 se plantea la preocupación por la gran huérfana que gime y sufre bajo el yugo de las tiranías, pero la masonería como heredera de los antiguos usos y costumbres, es poseedora del real secreto. Para conocer el Gran secreto, es necesario descifrar el enigma de la esfinge semienterrada, en la que está guardado y oculto, para ello es necesario adentrarse en las liturgias desde el grado de aprendiz hasta el de Sublime Príncipe del Real Secreto.